Las mujeres con una baja reserva ovárica suelen presentar una respuesta pobre al tratamiento hormonal de estimulación ovárica previo a la fecundación in vitro (FIV), lo que reduce las posibilidades de embarazo. Para revertir esta situación se postula el uso de testosterona, pues ensayos experimentales han observado que con su tratamiento previo se aumenta el número de folículos y ovocitos y, por tanto, la tasa de embarazos.
El ensayo controlado T-Transport determinará su papel en mujeres con baja respuesta a la estimulación ovárica. La utilidad de la testosterona en estos casos reside en la propia fisiología ovárica; en los receptores androgénicos presentes en los folículos, más numerosos, por ejemplo, en mujeres con ovario poliquístico o hirsutismo.
En este estudio, el tratamiento con testosterona alcanza los 60-65 días, ya que es el tiempo en que se desarrollan los folículos y pueden ser activados mediante testosterona para ser sensibles a la hormonoterapia de estimulación.
El Estudio T-Transport, con diseño doble ciego y controlado con placebo, incluirá a 400 mujeres de siete centros europeos, de las que 80 ya han terminado el tratamiento. El objetivo es superar el límite de lo considerado como baja respuesta (menos de 4 ovocitos) para maximizar las posibilidades de éxito, según se desprende de otra investigación.
En el T-Transport esperan que el pretratamiento con testosterona logre incrementar del 14 al 25-26% la tasa de embarazo, un aumento en torno al 10-12%.
Las mujeres bajo tratamiento activo reciben 5.5mg diarios de testosterona (vía gel transdérmico), lo que las sitúa en un nivel alto pero dentro del rango de normalidad de esta hormona en mujeres premenopáusicas. Sobre efectos secundarios, han observado un aumento del 15-20% de hirsutismo, pero es una situación reversible con la interrupción del tratamiento, hecho que no se ha producido en ningún caso. Se espera que el estudio esté finalizado a principios del 2008.
Fuente. Diario Médico